Be My Valentine

Love is in the air… naranaranaranaaaa

Este fin de semana se nos presenta pasteloso pasteloso, y no somos nosotros quienes para no aportar nuestro granito de azúcar, así que voy a proponeros unas cupcakes para enamorar.

Redoble de tambores por favor.

Deliciosas, no, súper deliciosas cupcakes de fresas y Champan rosado.

Sí, saben tan bien como pintan. A mi lo que más me gusta es el frosting, anda que no me lo pase bien calculando cuanto champan debía echarle, que rico estaba. ¿Qué os parecen los mini Cupidos? ¿A que son monos? Con lo poco romántica que soy yo y lo cuqui que me ha quedado.

Ahora os propongo un plan, yo el sábado he decidido envolverme en una manta en el sofá, poner una de mis películas favoritas, (creo que será Notting Hill me encanta como historia de amor) merendarme una cupcake con una taza de chocolate calentito, y ya si nos desmadramos del todo le echamos unas nubes al chocolate y que sea lo que tenga que ser, ya empezaremos el lunes con la dieta.

  

Cupcakes de Fresas y Champan

(receta del bizcocho adaptada de Martha Stewart)

• 200 g de harina de trigo
• 1 cucharadita de levadura
• ½ cucharadita de sal
• 115 g de mantequilla sin sal
• 215 g de azúcar
• 1 cucharadita de extracto de vainilla
• 2 huevos grandes
• 120 ml de leche
• 150 g de fresas

Buttercream de Champan rosado

• 300 g de azúcar glas (añadir un poco más si es necesario)
• 250g de mantequilla sin sal
• 30 ml de Champan

Precalienta el horno a 180 ºC y coloca las capsulas en el molde.

Lava, trocea las fresas y déjalas aparte, ahora pon en un bol la mantequilla y el azúcar y bate hasta que este bien incorporada. Por otro lado tendremos la harina junto con la levadura y la sal tamizadas, en el vaso de medir yo suelo dejar la leche con la vainilla listas para ser luego añadidas.

Ya tenemos el azúcar y la mantequilla, incorpora los huevos uno a uno y ahora agregas la mitad de la harina, una vez mezclada, echa la leche y la segunda tanda de harina.

Apaga la batidora y con la espátula agrega las fresas y remueve para que estén bien distribuidas.

Llena cada molde hasta poco más de la mitad y mételos al horno unos 20-25 minutos.

Mientras tenemos las cupcakes en el horno, podemos ir preparando la buttercream.

Pon en un bol hondo la mantequilla, el azúcar glas y dos cucharadas de champan, puedes usar el que quieras, pero a mi me gusta más el rosado.  Bate todo bien, ahora entenderás porque digo lo del bol hondo, por esa nube de azúcar que se levanta y cubre toda la cocina.

Una vez que saques los cupcakes del horno, puedes comprobar que están hechos clavando un palillo, si sale limpio es que están listas. Déjalas en una rejilla hasta que se enfríen y después las decoramos.

La decoración yo la he hecho con la espátula pero puedes usar una boquilla si quieres, se aconseja la Wilton 8B. Los pequeños cupidos son de fondant, he usado una taladradora con esa forma que compré en Lidl el año pasado, eran una cajita donde venían varias y son bastante útiles, seguramente podréis encontrarlas parecidas en las tiendas de manualidades o podéis optar por corazones.

Quizás os preguntéis porque he cambiado el frosting de esta receta, pues Martha Stewart usa un merengue italiano, pero como bien le dijo Richard Gere a Julia Roberts en Pretty Woman, "el champan realza el sabor de las fresas". 

Feliz San Valentín a todos.